arquitectura comercial
No sólo diseño, también es Branding y Logística
La Arquitectura Comercial debe de ser la respuesta integral a las necesidades del negocio. Su primera función es servir al cliente, a través de la venta del producto o servicio que se ofrece. Por un lado debo mostrar la esencia de la marca, para atraer al “Cliente Ideal” y por el otro, generar un proceso de venta fluido para fidelizarlo y convertirlo en cliente frecuente.
Cuando contratas un arquitecto para que diseñe tu tienda, no es igual que cuando lo contratas para diseñar tu casa.
Puedes que entiendas que en ambos casos lo que quieres es que funcione bien, te guste y se mantenga en presupuesto. Hasta ahí pueden llegar los parecidos. De hecho, en el caso de tu negocio no es tan importante que te guste a ti, como que le guste a tus clientes.
Pero hay mucho más dentro del diseño Retail. Cada proyecto es único y antes de iniciarlo hay que estar claro de hacia dónde queremos llegar.
CONOCER
“Si no sabes donde estás,
no podrás llegar a donde quieres ir.”
La primera fase para iniciar un diseño retail es entender lo que necesitas. Hay una parte de esto que lo conoces y por eso llamaste a un arquitecto, pero hay otras necesidades que puede que no sepas. Hablemos un poco de todas:
Definir objetivos: Los objetivos de tu nueva localidad los puedes definir desde diferentes necesidades: Captar nuevos mercados geográficos; captar otro tipo de cliente que el que ahora tienes; facilitar la operación; aumentar la venta/m2, etc. Probablemente sea más de uno, pero es importante definir el primario.
Definir Presupuesto: Es importante tener claro desde un inicio cuál es el presupuesto disponible para esta inversión. Si no se está claro, el arquitecto debe de ayudarte a aclararlo, pero no debe de avanzar en el proceso sin un número objetivo en mente o será causa de decepciones y de retrasos (por rediseño). No todos los proyectos necesitan la misma inversión por metro cuadrado y esto depende más de lo que se necesita que de lo que se quiere.
Definir aspiraciones: En ocasiones, tenemos aspiraciones que pueden ser intangibles o que no están alineadas directamente con los objetivos. Es importante poner todo sobre la mesa desde el principio para poder incluirlas, si son compatibles con los objetivos y el presupuesto.
Conocer los Usuarios: Hay dos grupos de usuarios que hay que conocer. Primero están los clientes. Quienes son, qué buscan, porque te prefieren, etc. Segundo están los operarios de la tienda. Son los que cierran las ventas y también hay que adecuar la localidad para sus necesidades
Conocer la Marca: Quien es tu marca. Cual es su visión y misión y cómo este proyecto va a acercarte ahí. Cual es su propuesta de valor de tu marca y como puedo evidenciarla. Tener claro cuál es la experiencia que quiere brindar la marca será la clave para poder crear espacios que la represente.
Conocer la Cultura: Tu cultura existe aunque no la hayas creado. Tu tienda debe de ser reflejo de ella o apoyo al cambio de esta, cuando se ha decidido esto.
Conocer la Operación: Una tienda nueva tiene la oportunidad de mejorar la operación y lograr lo que en una existente es imposible de mejorar. Por esto hay que identificar que parte de la operación es resultado de las limitaciones de tus tiendas anteriores y debe de pensares y que parte se quiere mantener
En otras palabras, este proceso de conocimiento terminará representando el Brief del proyecto
VISUALIZAR
Una vez se está claro en todas las necesidades del cliente y del proyecto, se puede iniciar a conceptualizar el proyecto.
Es una fase iterativa, en la que cada parte influencia a las otras y te hace repensar todas las partes. Siendo asi, vamos a describir las partes, aunque el orden que presentamos no es el cronológico del proceso:
Integrated Brand Experience: Tener espacios que representan tu marca, debería ser un objetivo primario. Para esto hay que entender la relación del cliente con la marca y mejorar lo que esta en el alcance del proyecto. Esta experiencia tiene que entenderse a lo largo de todo el viaje de compra y es por esto que realizar un diseño del Customer Journey.
Mood Board/Brand Board, Material Board: Estos tableros sirven para entender el “look and feel” que se está proponiendo para los nuevos espacios. Se realiza con ejemplos, fotografías del estilo que se quiere y de los materiales que se utilizarían
Diagrama de relación de áreas: Este diagrama es el primer paso para tratar la funcionalidad del proyecto. Desde el punto de vista de la operación, por donde llegan las mercancías y cual es su recorrido hasta llegar fuera de la tienda. Desde el punto de vista comercial, cuál es el recorrido del cliente y las adyacencias de las categorías de productos.
Diseño Esquemático: Es diseño propiamente dicho. Ya empezamos a tener planos con dimensiones reales y entender a mayor detalle cómo funcionará la tienda.
Estimados: en este momento, también podría realizarse una primera estimación de lo que conllevará el proyecto, tanto en costo como en tiempo.
Con este proceso agotado, se tiene una visión clara de lo que será el proyecto, como funcionará y como se verá y se puede avanzar, pisando firme, a la siguiente fase.
DISEÑAR
Una vez de acuerdo con lo que se quiere hacer, podemos desarrollar el diseño final del proyecto:
Desarrollado de Diseño: El diseño esquemático se convierte en un diseño arquitectónico detallado, tomando en cuenta los equipos reales, diseñando los mobiliarios especiales, la iluminación, etc. También hay que ajustar el diseño con el resultado de los diseños técnicos y de los equipos y materiales que se van seleccionando como definitivos.
Diseños Técnicos: A partir del desarrollo del diseño, se realizan los diseños estructurales, eléctricos, mecánicos, sanitarios, cctv, y un largo etcétera. El resultado de estos diseños, deben de integrarse a los arquitectónicos, por lo que es un proceso iterativo.
Selección de materiales y mobiliario: Este proceso debe de realizarse desde temprano y no esperar la construcción, porque puede generar cambios en los diseños y en los estimados.
Estimado de Costos: Con toda la información generada se realizan cotizaciones y se obtiene un estimado de costos mucho más preciso. Este proceso puede generar cambios en decisiones de diseño, lo que lo hace también un proceso iterativo.
Cronograma de Obra: Finalmente, es posible realizar un cronograma de obra. Esta fase también podría requerir modificaciones en la selección de materiales, equipamiento e incluso sistemas constructivos.
EJECUTAR
Ejecutar una obra es un proceso complejo y absorbente. Es importante tener aprobado el diseño, el presupuesto y el cronograma de obra.
Si se decide licitar la obra, entonces esta información servirá como marco de referencia, para la parte de construcción, pero la ejecución es más que solo la construcción.
En términos generales, el proceso de ejecución se compone de los siguientes aspectos:
Coordinación: En este proceso se involucran múltiples equipos, que si bien trabajan por un objetivo común, la realidad es que su interés es completar exitosamente su pequeña parcela. Coordinar todos estos equipos para que no interfieran unos con otros y pensando el el bien mayor es una actividad imprescindible para el éxito general del proyecto. Es importante desde un inicio definir una matriz de responsabilidades, en la que este claro quien aprueba cada cosa; quien es el responsable de ejecutar y quien debe estar enterado.
Administración: Gestionar todo el proceso de la ejecución, desde el punto de vista administrativo, es otra de las grandes tareas. Autorizar los pagos de los contratistas y subcontratistas, sobre la base de lo ejecutado y velar por que se realicen los pagos a tiempo son solo algunas de las funciones que mantienen la maquinaria a buen ritmo.
Supervisión: Velar porque se ejecute la obra, según fue diseñada, con la calidad requerida, según las normativas y leyes; todo esto en el tiempo programado.
Apertura: El proceso de apertura puede significar diferentes cosas en diferentes proyectos, pero desde que se concluye la obra, hasta que la tienda está operando, hay un sinnúmero de actividades que deben de incluirse en los cronogramas, para tener la visión real del proyecto.
Evaluación: Es necesario identificar las lecciones aprendidas para tenerlas en cuenta en próximos proyectos. Que se hizo de manera excelente, que se debería de hacer de otra manera y que no se previó, pero se pudo haber previsto.
Como ya se ha dicho, cada proyecto es único y es conveniente aclarar desde temprano el proceso que se llevará para lograr el éxito. Tener una visión de todas las fases, permite delinear esa idea maestra que permitirá hacerlo de la manera más conveniente para el éxito del proyecto específico que se piensa trabajar.